Un refugio excepcional de elegancia atemporal, esta histórica finca fue construida originalmente en 1900 y sometida a una meticulosa renovación en 2006, donde se conservó su esencia auténtica a la vez que se incorporaron comodidades refinadas. Rodeada por más de 25.000 m² de terreno privado, ofrece un santuario de belleza, tranquilidad y absoluta privacidad. La residencia principal se distribuye en dos plantas, diseñadas con sofisticación y calidez. La planta baja le da la bienvenida con amplios salones, una cocina de chef, un encantador comedor y tres amplios dormitorios dobles con dos elegantes baños. En la planta superior, tres suites adicionales, cada una con baño privado, crean un remanso de lujo para la familia y los invitados. Dos residencias de invitados totalmente independientes enriquecen la finca, cada una con un íntimo salón con cocina abierta, un dormitorio doble y baño privado. Estos espacios son perfectos para recibir invitados con estilo o para ofrecer alquileres a medida. Un versátil pabellón multiusos ofrece infinitas posibilidades, desde un gimnasio privado hasta un estudio de arte o taller. En el exterior, una magnífica piscina se encuentra rodeada de terrazas soleadas y sombreadas, creando un entorno idílico para recibir invitados, cenar al aire libre o simplemente sumergirse en la serenidad del estilo de vida mediterráneo. Para mayor exclusividad, la finca cuenta con una DIC (Declaración de Interés Comunitario), que permite la actividad comercial bajo licencia, lo que convierte a esta finca no solo en una residencia extraordinaria, sino también en una oportunidad de inversión excepcional. Es más que un hogar; es una declaración de prestigio, privacidad y belleza atemporal.